martes, 13 de enero de 2015

Etiquetado.

¿QUÉ DEBE LLEVAR UNA ETIQUETA?

-Nombre del producto (registrado)
-Logo/Marca.
-Modo de consumo (si requiere refrigeración o algún tipo de tratamiento para consumirlo)
-Componentes o ingredientes (algunos tambien ponen porcentaje de los mismos)
-Fecha de caducidad.
-Teléfono o método de contacto en caso de sugerencia o comentario (solo si estas dispuest@ a tomar en cuenta el comentario)
-Dirección o nombre de la empresa que lo fabrica.
-Peso
-Instucciones de uso.
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhd4cORx0624wiSQ4XW42SYTqRhpQIG3Q4W3m2oqU0kIKKUBBCBsjWNWL0mxM0RypRI72wu-SCvOgzB71rNnnL94RnkBA2D0TNJFt2c1ux6eWhw_HXoJHcpLjn7ibznSxk0uFAnAWFk00Q/s600/etiq_i2.png
 http://trabajoypersonal.com/wp-content/uploads/2013/06/etiquetas-en-los-alimentos.jpg






El engaño de los productos light.


La idea que mucha gente tiene es que los productos "Light" adelgazan o, a lo sumo, no engordan prácticamente nada, y llevados de esta creencia los consumen en cantidades excesivas. El resultado de ello es frecuentemente un incremento de peso mayor que si hubiesen optado por las versiones no ligeras de cada producto.
Creer que al eliminar el azúcar se elimina el problema, además de un error, puede contribuir a adoptar conductas incluso contraproducentes. Los alimentos con la denominación "Light" tienen un número de calorías por unidad de peso inferior a los de su clase, pero en ningún caso significa que no engordan, confusión que hace que estos alimentos sean consumidos sin límite ni control, olvidando que no son adelgazantes. Los productos "Light" tendrían algún efecto positivo para reducir el sobrepeso únicamente si se consumiesen en las mismas cantidades que los equivalentes sin esa calificación, circunstancia que generalmente no se da. La introducción en el mercado de más de 5.000 alimentos bajos en grasas, o sin grasas, en la última década ha contribuido a la epidemia de obesidad en Estados Unidos, según la Asociación Estadounidense del Corazón (AHA).
http://www.sienteamerica.com/media/uploads/extras2/light2.png
El problema comienza cuando las personas creen que pueden comer cantidades ilimitadas de galletas con poca grasa, yogures congelados y dulces. Aunque estos alimentos contienen menos grasa que las versiones originales, suelen tener más azúcar e incluso más calorías. A menudo nos olvidamos de limitar la cantidad cuando un producto se anuncia como bajo en grasa. El escoger productos alimenticios frescos y ricos en fibra permite a una persona consumir grandes cantidades con pocas calorías, relativamente, porque produce una sensación de saciedad. Los alimentos bajos en grasa que ofrecen más cantidad y fibra pueden reducir la sensación de hambre por un período más largo.